Con las infografías que hemos puesto en la sección anterior, su utilidad didáctica es más que evidente.
Pero no solo para exponerlas al alumnado, sino como propuesta de proyectos para el estudiante. Una infografía es, en esencia, una representación gráfica del conocimiento. Cuando el alumnado realiza una infografía tiene que hacer un esfuerzo de abstracción y resumen de contenidos para volcarlos visualmente de una forma significativa. Es un tipo de proyectos que propongo a mi alumnado todos los años, y me enorgullece muchos de sus resultados. Cuando un estudiante comprende la teoría y busca una manera imaginativa de exponerlos se produce verdadero aprendizaje. La única condición que sugiero es siempre dejar la oportunidad al estudiante de presentar varios borradores antes de la versión definitiva. Nunca enviar una 'infografía' para el 'fin de semana'. Debe ser un trabajo de semanas con un feedback adecuado por nuestra parte.
Existen muchos tipos de infografía según el propósito que pretendamos. Dividiría en infografía de carácter general, interactivas, y basadas en datos. Al mismo tiempo, siempre que propongamos trabajos infográficos al estudiante hay que orientarlos sobre la búsqueda de los recursos que necesitarán para las mismas. Por último, como en todos los proyectos hay que mostrarles cómo vamos a evaluar (rúbricas).
